Coronel Represivo

 El Coronel represivo Inirio Pérez Naut profesaba lealtad absoluta a Pérez y Pérez

1970

El comandante policial de la penitenciaria de la Victoria fue trasladado de puesto. ahora no comandaba una cárcel, sino una ciudad la de San Fco de Macoris.

Febrero-1971: Huelga en SFM

Había sido víctima mortal de la policía balaguerista el joven estudiante y trabajador de zapatería, Domingo (Papi) Perdomo, mientras participa de una movilización estudiantil que recuerda con repudio en las calles el vil ametrallamiento del que fueron objetos cientos de estudiantes el 9 de febrero de 1966 frente al Palacio Nacional, en la ciudad capital.

Pues el movimiento huelgario de San Francisco de Macorís fue un acción de pueblo tan convincente que, a pesar de que Balaguer en su discurso había advertido: «no estamos dispuestos a ceder y aceptamos el reto», su demanda número uno fue inmediatamente ejecutada por el jefe de Estado, que consistía en el traslado de la ciudad del Jaya del represivo coronel policial Inirio Pérez Naut.

Enrique Cabrera Vásquez (Mellizo) Torturado por Inirio Pérez Naut

Era el día de Navidad, 25 de diciembre de 1969. En diciembre de 1965 había sido aceptado en una célula de simpatizante organizado en el Movimiento Revolucionario 14 de Junio (1J4).

Todavía al recordar aquel episodio de mi vida juvenil del 25 de diciembre de 1969 apresado por el SS

En medio del azote que me propinaban los verdugos del SS irrumpió de manera violenta el comandante policial de la plaza, el represivo coronel Inirio Pérez Naut, quien sin reparar ante nada ni nadie se unió al grupo entrándome a patadas. Entonces caí al piso boca arriba y el corpulento coronel arreciaba sus andanadas de patadas mientras vociferaba "grita ahora abajo el gobierno, maldito comunista"...

Inesperadamente el sargento Williams se interpone frente al coronel, abre los brazos y dice en voz alta, "pare coronel, pare, que va a matar al muchacho." Inirio Pérez Naut se detuvo jadeante, mira al grupo de policía, y sin decir palabra alguna sale con la misma rapidez que entró de la oficina. Yo tenía apenas 17 años de edad.

Fuentes

Revista Ahora 7 de Septiembre de 1970

Pedro Vargas Safadit

Enrique Cabrera Vásquez